Croquetas de patata
Estas croquetas son muy diferentes a las que nosotros hacemos habitualmente, pero no por ello, menos buenas. Son muy habituales en la cocina Alemana y Belga.
Suelen usarse como acompañamiento en los platos principales, especialmente en carnes con salsa y creedme, son buenísimas.
No todas las patatas son aptas para esta receta, las mejores son las patatas harinosas. Al contrario que las patatas nuevas, que tenemos en primavera verano, ya que al freírlas es muy probable que se rompan y la patata quede empapada de aceite, quedando inservibles.
Estas croquetas son también muy apreciadas por los niños. Es una forma de que los pequeños tomen patatas y se animen a probar platos nuevos.
Qué ingredientes necesitamos:
- 800 g de patatas, cortadas en trozos.
- 40 g de mantequilla.
- 3 huevos enteros.
- Harina para rebozar.
- Pan rallado.
- Aceite para freír.
- Sal y pimienta negra recién molida.
Pelar las patatas y cocerlas con agua con sal a fuego medio, hasta que estén hechas. No es bueno que se deshagan ya que tendrían agua.
Mientras se cuecen las patatas podemos separar las claras y las yemas de huevo. Reservamos las yemas de huevo y batimos las claras para hacer más tarde el rebozado de las croquetas. Preparamos también un plato con la harina y otro con el pan rallado.
Una vez cocidas las patatas, las escurrimos bien. Si es necesario ponemos otra vez la cazuela un poco al fuego, para que se evapore el agua.
Ahora pasamos a aplastarlas. Es mejor hacerlo con un machacador de patatas o con un tenedor. De esta manera no introduciremos mucho aire y la masa estará más fuerte y mejor.
Es el momento de añadir la mantequilla, las yemas de huevo, y un poco de pimienta negra. Conviene hacerlo en caliente. Yo lo hago de forma envolvente, con una espátula de madera o similar, sin parar para que al introducir la yema de huevo, esta no se cuaje.
Yo a esta receta sólo le suelo poner la pimienta, pero si os gusta dar otro toque de sabor podéis ponerle nuez moscada, que combina muy bien.
Una vez que esta todo bien mezclado pasamos a formar las croquetas. El puré que se ha formado debe estar caliente, de lo contrario no podríamos moldear las croquetas.
Hay también maquinas para dar forma a las croquetas, lo que nos facilita esta tarea (que es el mas engorroso de la receta). Pero no os desaniméis, ¡no es difícil!
Pasamos las croquetas primero por harina, luego por la clara de huevo batido y finalmente por el pan rallado. Las dejamos enfriar.
Calentamos el aceite a 180º (si es en freidora mejor) y las vamos introduciendo. No es aconsejable meter muchas croquetas de una vez ya que corremos el riesgo de que se abran. Las doramos bien y dejamos que escurran el aceite en papel absorbente.
Es una receta sencilla, y después de hacerla unas cuantas veces veréis que podéis adaptarla de muchas maneras, añadiendo algún otro ingrediente. ¡Podréis hacer vuestra versión de las croquetas de patata.
Son un acompañamiento ideal de carnes o pescados en salsa.